La importancia del conflicto en la narrativa
La importancia del conflicto en la narrativa
A veces, con la necesidad de crear una historia que tenga muchos detalles, podemos caer en el error de olvidarnos de uno de los aspectos más importantes: el conflicto en la narrativa.
De hecho, es tan importante construir bien este punto que, si no lo haces, tu historia no solamente perderá fuerza, sino que será imposible que tus lectores lleguen al final.
Si quieres aprender más sobre este elemento, ¡sigue leyendo!
¿Qué es el conflicto?
El conflicto, en pocas palabras, es aquello que rompe el equilibrio de la historia. Existen toda clase de conflictos, desde problemas amorosos de adolescentes hasta grandes guerras entre las facciones más poderosas del mundo, y todas tienen el potencial de ser una fuerza positiva para la narrativa.
Por supuesto, eso es porque el conflicto es relativo a los personajes. De nada sirve que coloques de trasfondo una gran guerra si tus personajes están en otra parte del mundo y apenas les interesa lo que sucede en el campo de batalla. Por mucho esfuerzo que hagas, esa parte del conflicto siempre se sentirá secundaria y lejana. Te puede ayudar a llevar la temática, pero no a enganchar al lector ni darle vida a la acción narrativa.
Una buena historia estará llena de conflictos interesantes que son verdaderos problemas para el protagonista, y las mejores historias incluso van más allá y le dan este trato a los personajes secundarios y los villanos.
¿Por qué es importante?
Dicho esto, existe tal cosa como tener “demasiado conflicto”. Nunca caigas en la trampa de meter conflicto a la fuerza.
Este tiene que nacer de las debilidades de los personajes, de sus motivaciones y decisiones, y del estado del mundo.
Por supuesto, también hay todo un tema sobre cómo construir un conflicto que se sienta poderoso y real, pero para entrar en eso necesitamos otro artículo.
Por lo pronto, hablemos sobre las tres cosas que hacen que el conflicto sea un elemento vital en las historias.
Es lo que mantiene al lector enganchado
El tema del conflicto es que le añade urgencia al relato y nos da una razón para prestar atención a lo que sucede. Es decir, es lo que nos da una razón para meternos en la obra y dejar que nos envuelva.
La falta de conflicto hace que la historia se sienta aburrida y monótona. Como que el autor nos está dando un paseo por su diario en lugar de mostrarnos algo verdaderamente emocionante y digno de nuestro tiempo.
Es lo que activa a los personajes
El conflicto, además, es lo que permite que los personajes salgan de su zona de confort para enfrentar lo desconocido, para encontrar una razón para cambiar o luchar. Pone obstáculos que tienen que superar y les obliga a actuar, ya sea para recuperar la armonía perdida o generar un cambio mayor en el mundo.
Si los conflictos de la historia no están bien construidos, entonces la probabilidad de que tus personajes sean memorables es prácticamente nula. Claro, puedes darles una voz y quizás, si tienes muy buena prosa, conseguir que expresen sus formas idiosincrásicas de ver la vida, pero al final eso se quedará en buenas intenciones, porque sin conflicto el lector nunca los verá poner esa personalidad e ideas a prueba.
Es lo que hace creíble los acontecimientos de la trama
La otra cuestión es que si intentas mover una historia sin conflicto, deberás meter demasiadas conveniencias narrativas, argumentos sacados de la nada, como el súbito heredero que sale del charco o la invasión inesperada del reino vecino.
Los conflictos así pueden ser interesantes, pero solo si encuentras una forma de devolverle agencia a los personajes.
El punto es que nunca debes caer en la trampa de meter conflicto a la fuerza.
Este tiene que nacer de las debilidades de los personajes, de sus motivaciones y decisiones, y del estado del mundo.
Por supuesto, también hay todo un tema sobre cómo construir un conflicto que se sienta poderoso y real, pero para entrar en eso necesitamos otro artículo.
No cometas el error de dejar el conflicto fuera de tu historia
Por mucho que estés emocionado o emocionada por exponer a los lectores a todos los detalles del mundo y quieres tomarte tu tiempo para construir la historia, es importante que siempre le des un norte a la historia por medio del conflicto.
Piensa en todas las grandes obras de la literatura y verás que todas tienen un conflicto poderoso y determinante que arrastra el resto de la narrativa consigo.
¡Haz algo así y tendrás éxito!
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Buen consejo.
Que curioso. Cometí este error sin darme cuenta y ahora no sé que hacer.
Tengo algunas ideas, pero el problema es que no sé cómo unirlas