Errores en la trama: 5 historias clásicas que los tienen

Errores en la trama: 5 historias clásicas que los tienen

5 historias clásicas que tienen errores en la trama

La escritura es un arte que evoluciona con el tiempo y que cada vez se vuelve más compleja. Las audiencias son más sensibles a ciertas malas prácticas y, al mismo tiempo, se descubren mejores técnicas para hacer que la obra brille. Es por eso que, por muy raro que sea pensarlo, existen historias clásicas que, medidas con los estándares de hoy, tendrían errores en la trama bastante importantes.

Quiero que quede claro que la gran mayoría de las historias que están en lista siguen teniendo una calidad narrativa exquisita y que estos errores no las arruinan. El propósito del artículo no es criticar estas obras, sino compartir dos ideas:

  1. La construcción de historias de altísima calidad es tan complicada que incluso los grandes autores batallan para tener todo controlado.
  2. Los errores narrativos no tienen que ser una condena de muerte para las historias. ¡Lo cierto es que tus obras no tienen que ser perfectas para tener un inmenso valor narrativo!

Y ya sin más preparación, ¡empecemos!

Nota: habrá spoilers para las historias de Gilgamesh, Guerra de los Mundos, El Señor de los Anillos, Los Miserables y La Cenicienta.

Gilgamesh – Diabolus Ex Machina

Gilgamesh es reconocida como la historia más antigua de la humanidad y ha sido una de las piezas culturales más famosas y renombradas a lo largo de los siglos.

Gilgamesh es un personaje genial y su historia ha servido para inspirar a muchos autores. De hecho, fue una pieza pivotal en las indagaciones que realizó Joseph Campbell que le llevaron al descubrimiento de la estructura arquetípica universal: el viaje del héroe.

Sin embargo, Gilgamesh tiene un error narrativo que hoy en día consideraríamos garrafal: acaba con un Diabolus Ex Machina.

Cuando Gilgamesh finalmente consigue la planta mágica que le otorgará la eterna juventud, se distrae mientras se baña y una serpiente se la roba.

Si bien este desenlace favorece la temática de la obra (la obsesión con escapar de la muerta es una búsqueda sin sentido), eso no cambia el hecho de que este final aparece de la nada y es un Diabolus Ex Machina de libro que resulta totalmente anticlimático.

La obra sigue teniendo un valor cultural incuestionable, pero si se hubiera escrito hoy, quizás la audiencia habría sido más exigente.

Guerra de los Mundos – Deus Ex Machina

Guerra de los Mundos es uno de los libros más influyentes que se han escrito en el género de la ciencia ficción.

Es una lucha épica por la supervivencia que pone en perspectiva el valor de la vida humana y lo que significa en el contexto cósmico y hostil del espacio.

La historia es bastante profunda y los personajes son más que interesantes, pero, al igual que Gilgamesh, comete el terrible error de resolverse por medio de un Deus Ex Machina un poco ridículo: al final del día, resulta que los alienígenas invasores mueren al interactuar con el oxígeno de la Tierra.

Aunque la novela sigue siendo buena por la premisa revolucionaria que manejó en su problema y la forma en que lidia con su temática, desde el punto de vista de la trama este final no es solo anticlimático, sino que le quita mucho realismo a la obra.

¿De verdad? ¿La raza súper avanzada no pensó en revisar si el ambiente del planeta era habitable para ellos o no? Además de esto, el conflicto central se resolvió sin que los personajes hicieran algo al respecto. Era tan sencillo como esperar, lo cual le quita mucho peso narrativo a los retos que superaron y tampoco apoya la temática de la obra.

El Señor de los Anillos – Escenas importantes exploradas con exposición

En los libros de El Señor de los Anillos encontrarás algo que te sorprenderá si solo has visto las películas: muchas escenas épicas, como el asedio a Isengard, no las experimentamos en el presente, sino que las cuenta un personaje testigo.

En la escritura moderna, esto es una pésima práctica porque disminuye drásticamente la cercanía emocional de la audiencia e impide que esta pueda conectar con ese punto de la trama de forma profunda.

En la película, de hecho, identificaron este error narrativo y se aseguraron de contar todas las historias de forma paralela. Gracias a eso, la audiencia pudo conectar emocionalmente con todos los grandes eventos de la obra.

Claro está, la riqueza lingüística, la profundidad temática, la construcción de mundo y el desarrollo de los personajes de Tolkien es tan excepcional, que este detalle no le quita mérito a esta trilogía fantástica (la mejor que se ha escrito, en mi opinión), pero justo por eso es el ejemplo perfecto para trasmitirte las ideas que mencioné al inicio.

Los Miserables – Monólogos del autor

Víctor Hugo es probablemente el único escritor que puede salirse con la suya al incluir monólogos reflexivos propios en la mitad de su historia.

Esto se debe a su increíble profundidad dialéctica y lo honestas que son sus reflexiones, pero, incluso con esas características tan particulares, este error narrativo afecta su obra maestra.

¿Por qué? Bueno, para entender eso primero debemos comprender por qué los monólogos del autor no son una buena idea. En resumen, este tipo de monólogos tienden a tener dos debilidades:

  1. Le dicen a la audiencia “qué pensar”.
  2. Hacen que el ritmo narrativo se detenga por completo.

La honestidad de Víctor Hugo le ayudó a evitar la primera (y más importante) debilidad, pero el segundo es inescapable. Esta es una de las razones por las que el ritmo narrativo de Los Miserables, para estándares modernos, tiende a sentirse tan lento e inconsistente.

La obra sigue siendo una joya de la humanidad y lo será siempre, pero también es un buen aprendizaje para los escritores jóvenes que están surgiendo ahora.

La Cenicienta – El interés romántico es un personaje irrelevante

El cuento clásico de la Cenicienta, en la versión tradicional que cuenta la gran mayoría, incluido Disney, tiene un error narrativo recurrente: el príncipe es un cero a la izquierda.

A pesar de que la historia se enfoca en los sueños y el amor, lo normal siempre ha sido que el príncipe sea una idea abstracta que representa poco más que el éxito para Cenicienta.

El problema de esto es que disminuye drásticamente el valor simbólico de la lucha de Cenicienta, porque no entendemos en realidad cómo es que el amor del príncipe la hará feliz. No entendemos su relación porque la verdad es que el príncipe no es una persona real, sino un vehículo para la trama.

Ahora, lo interesante es que claramente no soy el único que lo piensa. En las mejores películas modernas de Cenicienta como Por Siempre Cenicienta y el remake de Disney, justamente se atacó este error narrativo, dándole mayor presencia y complejidad al personaje del príncipe y la historia es drásticamente mejor gracias a eso.

¡Esto también es una prueba de que la escritura evoluciona por una buena razón! No debes pelearte con el cambio, sino entender las partes de ese cambio que pueden ser beneficiosas para tu historia.

¡Y con eso acabamos! Espero que este contenido te haya resultado interesante. Si te gustaría agregar otra historia clásica que contiene algún error narrativo, ¡hazlo en los comentarios! ¡Seguro que podemos tener una plática interesante!

2 thoughts on “Errores en la trama: 5 historias clásicas que los tienen

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