Los clichés: ¿son tan malos como parecen o hay algo más?

Los clichés: ¿son tan malos como parecen o hay algo más?

Los clichés: ¿son tan malos como parecen o hay algo más?

Independientemente si eres alguien a quién le gusta consumir historias o eres la clase de persona que también quiere producirlas, lo cierto es que es muy probable que cuando alguien dice la palabra “cliché” de inmediato la asocias con algo negativo.

Honestamente, es difícil culparte si es tu caso. Después de todo, la abundancia de clichés es exactamente una de las cosas que puede arruinar cualquier historia y que hace que la industria se sienta plana y aburrida.

Una de las cosas que las personas le critican muchísimo al universo cinemático de Marvel es que repiten con demasiada frecuencia la misma fórmula y, después de un tiempo, cada película de superhéroes comienza a sentirse idéntica a la anterior.

Sin embargo, hay algo muy curioso: una de las razones por las que las personas disfrutaron tanto Infinity War y el arco de varios de los Avengers en Endgame, es porque Marvel aprovechó sus propios clichés y les dio la vuelta.

Curiosamente, fue el uso consciente de los clichés lo que elevó estas historias y enamoró a tantas personas. Por eso, en este artículo, quiero explicarte qué son los clichés, qué efectos negativos pueden tener en una historia y, también, cómo pueden beneficiarla.

¡Empecemos!

¿Qué es un cliché?

Un cliché es una expresión, idea o situación que se ha vuelto trillada, predecible o demasiado usada, al punto de perder su originalidad o impacto. En otras palabras, se trata de un recurso narrativo, lingüístico o visual que ha sido utilizado tantas veces que se ha vuelto convencional, aburrido y desprovisto de significado.

Por ejemplo, en la literatura, el cliché puede ser una trama predecible o personajes estereotipados, mientras que en el cine, puede ser una escena romántica con el sol poniéndose detrás de los personajes. El uso de clichés puede disminuir la calidad de una obra y hacerla menos interesante o relevante para el público. Por lo tanto, los escritores, cineastas y otros artistas suelen evitar el uso excesivo de clichés y buscan enriquecer sus obras con ideas y elementos originales e innovadores.

¿Son malos para una historia?

El uso excesivo de clichés puede afectar negativamente la calidad de una historia y hacerla menos interesante para el público. Esto se debe a que los clichés son elementos narrativos predecibles y estereotipados que pueden hacer que la historia parezca poco original o poco creativa.

Sin embargo, el uso ocasional y efectivo de clichés puede ser útil para conectar con el público y darles una sensación de familiaridad y comodidad. Los clichés pueden servir como un punto de partida para desarrollar ideas y personajes más interesantes y complejos.

En general, es importante que los escritores y creadores de historias se esfuercen por ser originales y evitar depender demasiado de los clichés. En lugar de eso, deberían buscar nuevas formas de contar historias y desarrollar personajes que sean auténticos, interesantes y significativos para el público.

Ejemplos de clichés clásicos en las historias

Algunos ejemplos típicos de clichés serían:

  1. El personaje principal que es el elegido para salvar el mundo.
  2. El héroe que salva a la damisela en apuros.
  3. La batalla final entre el bien y el mal.
  4. El malvado que se ríe y explica su plan antes de ser derrotado.
  5. El personaje que sacrifica su vida para salvar a los demás.
  6. La chica popular que se enamora del marginado.
  7. El protagonista que aprende una lección importante al final de la historia.
  8. La narración de la historia desde la perspectiva de un personaje muerto.
  9. El personaje que sufre una pérdida personal importante para impulsar la trama.
  10. El personaje que lucha contra su destino para ser libre y tomar su propio camino.

Es importante recordar que estos clichés pueden funcionar en una historia si se utilizan de manera efectiva y creativa, y que la originalidad y autenticidad son fundamentales para crear una historia significativa e interesante.

Ventajas de los clichés en una historia

Entre las ventajas que los clichés pueden aportar a una obra, tenemos los siguientes. ¡No te los pierdas!

Simplifican la comprensión de la historia

Primero que nada, hay una buena razón por la que casi todas las historias tienen al menos un par de clichés: al final del día, estos ayudan a dar estructura a la historia porque la audiencia ya sabe de antemano lo que los símbolos representan y no hace falta pasar demasiado tiempo explorándolos.

Un ejemplo es el típico personaje chistoso que está ahí para decir cosas que te hagan reír y bajar la seriedad del tono de la historia. Nadie se pregunta por qué ese personaje bromea constantemente ni lo considera poco realista, a pesar de que una persona normal no actuaría como él o ella.

Claro está, y como mencioné antes, el problema está en que si un escritor se acostumbra a depender demasiado de estas “plantillas prefabricadas” dará la impresión de que sus historias son planas, predecibles y que su escritura es floja.

La cuestión es encontrar un balance. Solamente valerse de los clichés cuando el elemento que ese cliché desarrolla es algo poco importante para la trama y siempre tratar de darle aunque sea algo de profundidad.

Por ejemplo, en Kung-Fu Panda, Oogway es un cliché del típico maestro de artes marciales que se ha vuelto uno con el universo, pero a nadie le molesta, por el contrario, muchos adoran a este personaje. La razón es muy sencilla: Oogway cumple una tarea muy específica en la trama, y después deja que el resto de los personajes más trabajados y originales la sostengan.

Digo, también está el tema de que Oogway cumple perfectamente su rol de personaje paragon, pero eso es información para otro artículo.

Aportan una base a la narrativa

Te guste o no, todos tus personajes favoritos forman parte de uno u otro cliché, y si no es así, lo acaban de crear.

Eso es porque los escritores y la audiencia necesitan por lo menos una base para empezar a construir el personaje y, a partir de ahí, modificar la fórmula.

Por ejemplo, Harry Potter es el típico personaje bueno y de corazón puro, pero a medida que la historia avanza Rowling le va aportando más y más profundidad a su persona, y termina logran que se sienta único y especial para el espectador (es una lástima que J.K Rowling no ha mantenido ese nivel de calidad últimamente).

Incluso alguien tan legendario como Aragorn es cliché en su base: el príncipe heredero que no quiere ser rey, pero que eventualmente acepta su destino. Pero, como te podría decir cualquiera que haya vivido el viaje de este personaje, Aragorn es mucho más que eso.

El cliché solamente actúa como una base para introducir el personaje y que la audiencia “entienda” de qué se trata, ahorrándole al escritor una gran cantidad de exposición que realmente no es importante.

Crean expectativas en el lector que luego puedes romper

John Truby, en su libro Anatomía del Guión, explica esto a detalle si estás más interesado en el tema, pero, en pocas palabras, la mejor forma de utilizar un cliché es implementarlo para romper con las expectativas del lector o espectador.

Por ejemplo, ese mismo personaje chistoso y adorable que mencionamos, podría terminar siendo el villano o cambiar de bando cerca del final de la película. O la típica interacción romántica entre dos personajes puede ser la base para explorar una temática distinta, más relacionada con el crecimiento personal que la pasión.

Es decir, implementar un cliché y exagerarlo es una gran forma de asegurarte que tu audiencia será traicionada por su propia experticia y jamás será capaz de ver lo que escondiste.

Por supuesto, eso no significa que los twists puedan salir de la nada ni tampoco deberías intentarlo, porque justamente el espectador será tu mayor aliado. De hecho, es probable que incluso si le atina, él mismo se convencerá de que está equivocado y se sorprenderá de todas formas.

Es un elemento muy poderoso que cualquier buen escritor debería aprovechar.

Entonces, ¡no le temas a los clichés! Todo elemento narrativo tiene sus ventajas y sus desventajas, y los clichés no son la excepción. ¡Utilízalos para mejorar tu escritura!

Si te gustaría ver esto en práctica, puedes leer mi obra de Jagger en Wattpad o comprar la versión física en Amazon, un libro que utiliza los clichés específicamente para sorprender al lector. ¿Te fijas cómo no me importa aceptarlo descaradamente? ¡Te apuesto que te costará determinar qué clichés se romperán del todo y cuáles solo un poco!

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