El flashback: ¿cómo utilizar la analepsis?
El flashback: ¿cómo utilizar la analepsis?
Si eres fan del anime o las series animadas, seguramente estás bastante familiarizado con los flashbacks, quizá hasta el punto que estás completamente harto de que te recuerden una y otra vez eventos que ya conoces.
Sin embargo, hay formas legítimas de utilizar el flashback, que no tienen nada que ver con alargar capítulos para que la serie no alcance al manga, y deberías conocerlos para saber si te conviene o no agregar este recurso a tu historia.
¿Quieres descubrir más sobre el tema? ¡Sigue leyendo!
¿Qué es un flashback o analepsis?
El flashback o analepsis (como se debería decir en español, pero nadie lo hace), es una escena retrospectiva que muestra sucesos anteriores al presente del relato.
Los flashbacks son muy buenos para dar contexto, pero, si abusas de ellos, puedes ocasionar que el flujo de la historia se vea afectado negativamente, porque al final del día estás alterando la cronología de la obra y rompiendo la linearidad de la escena.
Es importante cuidar este detalle, porque un flashback no avanza la historia, sino que apoya el arco de los personajes y la evolución de la trama.
Tipos de flashbacks
En general, existen dos tipos de flashbacks y es importante que los entiendas para determinar cuál es el más apropiado para tu historia.
¡Aquí te los comparto!
Recordatorios
Los recordatorios son escenas contextuales cuyo principal propósito es refrescar la memoria de la audiencia.
Es como cuando Gandalf le dice a Merry “tú conoces al líder de los Nâzgul, es el que apuñaló a Frodo en la Cima de los Vientos”, y te pasan una imagen rápida de la escena en la que sucedió.
También es muy común en animes muy largos como Naruto y One Piece cuando aparece un personaje que fue introducido hace 100 episodios y necesitas que la audiencia recuerde quién era.
Invasivos
Estos flashbacks son los que ponen en pausa la historia para contar eventos que sucedieron antes. Son mucho más detallados y suelen contarse casi como una historia paralela a la trama principal.
Ejemplos de esto sería la serie de Arrow, que constantemente salta del presente a la isla donde naufragó Oliver, o en Bleach cuando frenan la saga para introducir más de diez episodios que explican la rebelión de Aizen.
La importancia de estas analepsis es que permiten que el lector viva en carne propia eventos que son claves para la trama, ayudándole a crear un vínculo emocional porque no le contaron las “tragedias” o “victorias”, sino que las vivió junto a los personajes.
Por supuesto, el problema con estos flashbacks es que, como su nombre lo indica, son invasivos. ¡No debes abusar de ellos!
¿Cómo aprovechar el flashback?
Ahora que sabemos qué es una analepsis y los tipos que hay, es hora de hablar sobre las buenas prácticas que te ayudarán a aprovechar el flashback al máximo.
No abuses de él
Sé que esta es la tercera vez que lo digo, pero eso es porque si le haces caso a este tip, lo más probable es que tu flashback sea bienvenido por la audiencia y aporte a la historia.
No tienes que recordarle todo a los lectores ni tampoco es buena idea invadir la obra para presentar todos los eventos del pasado. A veces, incluso, lo cierto es que te conviene guardar el misterio y confiar en la imaginación e inteligencia de tu audiencia.
Usa este recurso a cuenta gotas y siempre analiza con mucho cuidado lo que aporta a la obra.
El flashback debe contar una historia
Los flashbacks no deben ser información expositiva y ya, sino contar una historia que añade valor a la trama principal. Esto es incluso cierto con los recordatorios, porque si estás reexplorando una escena de la obra, es porque necesitas expandirla y darle más contexto.
No incluyas información inútil solo porque sería “cool” ni tampoco metas analepsis invasivas para fanfarronear tu increíble lore. Si no es una estructura narrativa propia, entonces no es más que información, y puedes resumirla en diálogos.
Debe ser útil para entender las motivaciones y el arco del personaje
Como mencioné antes, el punto de los flashbacks es que te permitan entender las motivaciones y el arco de los personajes, ya sea refrescándote escenas que cambian a la luz de nueva información o proporcionando una visión más amplia de su pasado.
Recuerda que, técnicamente, estás poniendo pausa y un paréntesis gigante en el flujo de la historia para contar un flashback.
Es, literalmente, lo mismo que ponerle pausa a una película para explicarle a todo el mundo por qué el personaje hace lo que hace. A menos que la información que ofrezcas sea genuinamente oportuna y útil, se sentirá como una pérdida de tiempo y arruinará una parte de la experiencia.
¡Y con eso llegamos al final! Como ves, los flashbacks o analepsis pueden ser extremadamente útiles. ¡No es por nada que son tan comunes!
Si te gustó el artículo, no dudes en leer este otro sobre los plot holes y cómo evitarlos. ¡Te encantará!
Tengo una pregunta ¿cómo meto un flashback? Es decir ¿cómo puedo indicar cuando es un flashback y cuando no? (Lo digo porque mi historia está narrada en tiempo pasado, y en primera persona, y no quisiera que la gente se confundiera?