El protagonista olvidado: una epidemia preocupante
El protagonista olvidado: el problema de dejar a un lado a tu personaje principal
Cada vez veo con más frecuencia, sobre todo en las series de anime, que en la modernidad parece haber una especie de síndrome del protagonista olvidado. Esta es una práctica narrativa pésima que me preocupa muchísimo y que no quisiera que contagiara a otros escritores prometedores solo porque lo ven en series muy populares.
Por eso, en este artículo te quiero hablar sobre este vicio narrativo y explicarte exactamente por qué puede ser tan negativo para una historia.
Si te interesa aprender más al respecto, ¡lee este artículo hasta el final!
¿A qué me refiero con “protagonista olvidado”?
Cuando hablo del síndrome de protagonista olvidado, estoy hablando de aquellos arcos narrativos prolongados en los que una historia le quita protagonismo a su personaje principal para transferírselo a otro, ya sea un personaje secundario o el antagonista.
Quiero hacer hincapié en el matiz que hago al decir “arcos narrativos prolongados” porque no estoy criticando la decisión de pasar la batuta narrativa a otros personajes. Esta es una práctica que, bien implementada, puede aportar mucho a una historia y ayudar a que el peso de la trama no recaiga únicamente en los hombros del protagonista, sino que haya otros personajes capaces de aliviar esa exigencia.
Esto es particularmente útil en historias con una trama compleja y un mundo vasto y repleto de facciones, el cual requiere que se exploren muchas perspectivas para que tenga sentido la historia.
Entonces, no estoy, en lo absoluto, pidiendo que las historias estén eternamente enfocadas en los protagonistas, ni promulgando que todo desvío representa un error narrativo.
Este es el típico caso de “todo en exceso es malo” en el que una ruta narrativa emocionante puede ser perjudicial si se enamora demasiado de sí misma y no hace un esfuerzo por incluir al que (se supone) es el personaje más interesante de la obra.
¿Cuáles son los problemas que esto genera?
Casi todas las series de alta calidad narrativa que pasan por momentos de mucha debilidad en su ritmo y trama suelen sufrir no porque los escritores de repente olvidaran cómo hacer su trabajo, sino porque tomaron una ruta narrativa que les obligó a dejar a un lado a su protagonista por un periodo demasiado extenso.
Si eres de aquellos que tienen un prejuicio contra los protagonistas, esto puede parecer una exageración, pero esa reacción solo demostraría una profunda falta de comprensión de la importancia que tiene el personaje principal.
Para empezar, el protagonista, por un simple caso de estructura narrativa, es el dueño del conflicto central que mueve la trama y, por lo tanto, su progreso como personaje está directamente atado al progreso de la historia.
Por ejemplo, en My Hero Academia, la lucha entre héroes y villanos no es tan importante como la evolución de Midoriya para convertirse en el “héroe número 1”. Es decir, esa lucha se necesita para que el viaje de Midoriya tenga valor simbólico y temático, pero el punto es que está SUBORDINADA al arco del protagonista.
Una de las razones por las que las últimas dos temporadas de My Hero Academia han estado lejos de la calidad de las primeras, a pesar de ser emocionantes, es que toda la historia de Midoriya se puso en pausa para poder elaborar una construcción de mundo bastante compleja y vasta.
Esto, a su vez, hace que el personaje se quede atrás en comparación con la trama, lo que hace que su calidad como personaje principal disminuye y, muy probablemente, los escritores se vean forzados a meter como sea una excusa para que el personaje crezca en muy pocos capítulos lo que no creció en los anteriores.
Eso también lo vemos en las temporadas del “medio” de Attack on Titan, donde Eren era un personaje secundario en su propia historia, en la que sujetos como Levi y Erwin llevaban la batuta. No es casualidad, por lo tanto, que muchos consideraran que Eren era un mal protagonista hasta que, de repente, Eren de un cambio drástico y pase a ser un personaje que todo lo puede y alrededor del cual gira toda la historia.
En este caso, los escritores fueron lo suficientemente talentosos para librar ese obstáculo con mucha habilidad y calidad, pero eso no cambia los efectos desastrosos que la historia sufrió en cuanto a ritmo narrativo.
¿Por qué ocurre esto?
Lo creas o no, hay historias que son mucho más proclives a sufrir de este mal que otras: las historias épicas con protagonistas débiles o con mucho margen de mejora.
¿Por qué? Bueno, porque si las capacidades del protagonista le impiden tener la competencia necesaria para lidiar con la complejidad de la situación, como escritor necesitas introducir un personaje que pueda hacerlo.
Volviendo a Attack on Titan, queda clarísimo que Eren es un bebé de pecho al lado de Levi y Erwin, por lo que no está ni medianamente capacitado para enfrentar todos los conflictos que presenta la trama como la conspiración tras las murallas y la Titán Hembra.
Del mismo modo, Midoriya no está en lo absoluto a la altura de los héroes más poderosos o de los villanos que están en el centro del arco narrativo. De hecho, Midoriya no está ni calificado para participar en la planeación del conflicto.
Las historias así tarde o temprano requerirán que el protagonista se ponga a un lado a medida que la escala del conflicto incrementa, a menos que sean capaces de adelantarse a este problema planeando bien cómo lidiar con él.
¿Cómo puedes evitar que te suceda si tienes un protagonista con las características que mencioné antes?
Entonces, ahora la pregunta crucial es, ¿cómo evitar que esto te ocurra?
Esta cuestión tiene en realidad tres respuestas que aplican según el tipo de historias que quieras construir:
- Asegurarte que los desvíos de la historia no son demasiado largos y que el protagonista vuelve a la historia relativamente pronto. Esto es lo que hacen historias como El Señor de los Anillos en las que el salto de perspectivas entre personajes es constante y todas tienen oportunidad de progresar a un ritmo muy similar.
- Si es inevitable que tengas que desviarte del conflicto central, ASEGÚRATE de meter al protagonista en el desvío. Es decir, si vas a construir a otro personaje o darle la batuta, no se la des al completo, sino que deja que el protagonista siga teniendo un rol que le permita continuar su progresión. Esto lo podemos ver en Full Metal Alchemist donde, a pesar de que los protagonistas necesitan estar rodeados de personajes más competentes para lidiar con los conflictos de la trama, nunca están lejos de la acción y esta siempre aporta en la progresión de su arco.
- Ingeniártelas para darle a tu protagonista una progresión acelerada que le permita crecer al mismo ritmo que el conflicto épico escala. El tema con esto es que no es fácil justificar narrativamente esta evolución sin romper la suspensión de la incredulidad de la audiencia. Esta solución la vemos bien implementada en Blue Lock donde el acelerado crecimiento de Isagi le permite estar siempre a la altura (aunque por muy poco) del conflicto que se le presenta.
Por supuesto, cada una de estas soluciones resultará mejor o peor dependiendo del contexto de tu historia, y por eso debes considerar muy bien lo que cada una te aporta.
¡Y con eso acabamos! Espero que este artículo te haya enseñado algo interesante. Si fue así y ya sabes qué es un protagonista olvidado y cómo evitarlo, ¡asegúrate de dejar tu comentario!
Todo esto me recuerda a lo que pasaba en la serie the Flash, lástima lo que terminó siendo, cuando en primeras era una serie muy buena.
Ok esto no tiene nada que ver con el tema del artículo pero JEFS dime esto.
Tengo un ánime llamado toradora que es de comedia romántica y tengo que decir que me gustó mucho. Claro no lo considero una obra maestra pero que si lo considero una gran serie y pienso yo de que tiene una gran pareja pero he oído y vistos críticas sobre este ánime sobre que la pareja es tóxica y esas cosas lo cual no puedo evitar sentirme enojado. Claro se que eso no debería de importarme pero de verdad tengo la sensación de que los que critican no parecieran haber entendido la serie tal vez sea yo el equivocado pero no se creo que si estoy equivocado pero al mismo tiempo no.
Si te has visto la serie quiero saber tu respuesta JEFS