La lógica en las historias de fantasía y su importancia
La lógica en las historias de fantasía y su importancia
Si soy completamente honesto, una de las críticas a las historias de fantasía que más me molesta es la idea de que no tienen por qué tener sentido. Es peor, incluso, cuando el argumento es usado por alguien que está tratando de defender los errores y desaciertos de sus historias favoritas.
“Por favor, puedes creer en [inserta elemento fantástico de la historia], pero no en [inserta error garrafal de la trama que realmente no tiene excusa]”.
Esto me molesta muchísimo porque, primero, demuestra que quien está hablando no entiende para nada cuál es el punto de las historias fantásticas y, segundo, no está interesado en sujetar al artista a ningún estándar mínimo de calidad. Mientras haya acción y no tenga que pensar mucho, bien.
Yo no soy nadie para decirle a alguien cómo tiene que disfrutar una historia, pero sugerir que está mal esperar algo de lógica en una novela, película o serie fantástica es simplemente ridículo y le hace daño al género.
Sin embargo, también es cierto que hay particularidades en la forma que estas historias funcionan que provocan que la lógica desarrolle ciertas tareas que en otros géneros no son tan importantes.
Si te interesa que hablemos a detalle sobre esto, ¡sigue leyendo!
Te permite adentrarte en el mundo
Uno de los logros más importantes que debe alcanzar una historia fantástica es construir un mundo del que puedas formar parte. Esto no es fácil de lograr, aunque la imaginación del lector sea un poderoso aliado.
Aunque de buenas a primeras creas que eres capaz de hacerlo (si has jugado Dungeons and Dragons seguro que piensas que es fácil), lo cierto es que requiere bastante trabajo y reflexión construir un mundo que realmente se sienta real.
Piénsalo de esta forma, ¿qué hace que creas que tu país existe? ¿Lo has visitado por completo? ¿Conoces al mandatario? ¿Te consta que fue fundado hace cientos de años en lugar de unas décadas?
Quizás estas preguntas te parezcan ridículas, pero no lo son. Lo que pasa es que se responden fácilmente porque existen mapas, clases de historia, periódicos, redes sociales, conversaciones entre paisanos, en fin, un sinnúmero de fuentes de información que te han permitido construirte una idea tan firme sobre el mundo y tu país que es absurdo pretender que son falsas.
Ahora, si esa gigantesca cantidad de información constantemente se llevara la contraria, fuera incongruente o impredecible, no sería tan extraño que las personas la cuestionaran.
Lo mismo sucede con las historias de fantasía que tienen lugar en mundos vastos y nuevos que salieron de la mente de un individuo: las fuentes de información deben ser congruentes y apoyarse entre sí, y deben haber reglas claras en el mundo.
Esto es todavía más cierto cuando la historia en sí es una secuela o contiene referencias importantes a figuras bastante reconocidas.
Un claro ejemplo de esto es Paraíso Perdido de John Milton, un poema épico que relata la guerra entre el cielo y el infierno y maneja una gigantesca cantidad de personajes que tienen una presencia muy fuerte y estudiada en nuestra cultura judeocristiana como Dios, Satanás, el ángel Gabriel, el ángel Miguel, Jesús, Adán y Eva, etcétera.
La cuestión es que, incluso si no eres alguien religioso, es muy probable que tengas cierto conocimiento de estas personalidades y entiendas a grandes rasgos de qué van, qué representan.
Por lo tanto, uno de los grandes retos de Milton era encontrar la forma de contar su relato siendo siempre fiel a lo que estas figuras representaban, de forma tal que el lector nunca se sintiera confundido.
Esto, por supuesto, no solo se limita a la construcción de personajes ya conocidos, sino que también incluye las mismas reglas que existen en un mundo fantástico.
Por ejemplo, en Harry Potter, los magos solo pueden hacer hechizos con varitas y movimientos específicos; en Eragon, puedes usar magia solo si conoces las palabras del idioma antiguo; y en Narnia la magia no está al alcance de las razas comunes del mundo.
Es cierto que cada mundo puede construir el sistema de magia que quiera, pero una vez que las reglas están puestas, tiene que respetarlas. Si las llegara a romper, entonces necesita justificarlo para que el mundo tenga sentido. En ese caso, realmente lo que está haciendo es agregando una cláusula a la regla antes mencionada.
De la misma forma, es importante ser muy inteligente a la hora de colocar límites en tu sistema. De lo contrario, pueden suceder desajustes como en el Prisionero de Azkaban cuando descubrimos que Hermione está haciendo uso de un aparato mágico que le permite volver en el tiempo.
Si realmente existe un objeto tan poderoso, ¿por qué rayos no lo utilizan los magos como Dumbledore para evitar tragedias? ¿No se podía haber evitado el asesinato de los padres de Harry? ¿Haber emboscado a Voldemort antes de que subiera al poder? ¿Es de verdad su mejor uso ayudar a que una adolescente haga clases extra?
Verás, la existencia de este objeto no es el problema, son las reglas alrededor de él. No están bien construidas y rompen la lógica del mundo. Te hacen preguntarte cosas obvias que deberían tener respuestas rápidas y concisas, o peor, inventarte por tu cuenta las razones.
Por ejemplo, es muy fácil suponer que el artefacto solamente puede ser utilizado por personas que tengan un propósito puro e inocente, o que nunca hayan ejercido violencia contra otros. Si bien es cierto que eso podría explicar hasta cierto punto por qué otros magos más poderosos no lo utilizan, es un invento que me tuve que fabricar para mantener la lógica del mundo.
Quizás seas capaz de aguantar uno o dos errores así si la trama es buena, pero si tienes aunque sea algo de sentido común, esto eventualmente te quitará el disfrute que tienes por la historia.
Te ayuda a creerte las historias
De la misma forma en que la lógica te permite creer en un mundo fantástico, también te hará que sea más sencillo meterte en la historia y dejar que te enamore.
Uno de los problemas más grandes que veo en las películas hoy en día, es que ignoran esto de una manera descarada, hasta el punto que luego intentan insultar a los fanáticos para evitar las críticas y poder pretender que sus errores son realmente parte de un mensaje más profundo.
Esto es estúpido. Incluso si de una manera rebuscada puedes encontrarle sentido a una acción particularmente extraña en una fantasía, una buena historia no necesita esos extraños malabarismos para transmitir un mensaje profundo, y mucho menos si es a costa de romper la lógica de la historia.
Un ejemplo de esto es cuando, en The Last Jedi, Rose impide que Fynn se sacrifique por la rebelión diciendo “no ganaremos destruyendo lo que odiamos, sino salvando lo que amamos” y luego le da un beso mientras los villanos hacen un hueco en la última fortaleza de los rebeldes y se preparan para masacrarlos a todos.
Si al ver esta escena te sacaste de onda, pero no sabes por qué, déjame decirte que tienes sentido común y de una manera inconsciente habías identificado la incongruencia temática de esa escena.
Primero que nada, es una falacia lógica, ya que, especialmente en Star Wars, “destruir lo que odias” muchas veces es igual a “salvar lo que amas”. Ambas cosas no son mutuamente excluyentes. Además de eso, la película ya nos había presentado como un héroe a un personaje que hizo exactamente lo mismo que Finn quería hacer 10 minutos antes: Holdo utilizando el hiperespacio para destruir la flota enemiga (esto también es un error de lógica, pero no entremos a detalle por ahora).
En pocas palabras, la escena de Rose no tiene ningún sentido, ni temático, ni contextual, ni siquiera romántico si vamos a eso.
Quizá para algunos este tipo de cosas no sean importantes, pero ahí es donde pienso que se equivocan. ¡La diferencia entre una historia que trasciende el tiempo y otra que simplemente es un hit comercial está en esos detalles!
Te da la oportunidad de entender los símbolos dentro de la historia
Si leíste mi artículo sobre los símbolos en los libros de fantasía, seguramente recordarás que hay muchas formas de descubrir mensajes sutiles y profundos dentro de tus historias favoritas.
Sin embargo, también es importante recalcar que el potencial de los símbolos puede verse afectado en las historias que no respetan las reglas que ellas mismas han trazado.
Por ejemplo, supongamos que hay un monstruo del cual se dice que si lo matas, tu alma será consumida y morirás con él. En este caso, el protagonista puede tener algún tipo de motivación vengativa, ser alguien que está tan consumido por odio que está dispuesto a sacrificar su alma para obtener su objetivo; sin embargo, conoce a alguien que poco a poco le ayuda a lidiar con ese odio hasta que matar al monstruo no es tan importante para él, porque encontró otra razón para vivir.
Ahora, supongamos que por ciertas circunstancias, esa persona especial va a ser devorada por el monstruo, y la única forma de salvarla es matando a la criatura. En ese caso, el mensaje es poderoso, porque fuimos capaces de presenciar la evolución de nuestro personaje principal y sabemos que no va a sacrificar su vida por una patética venganza, sino que lo hará por amor, digamos.
Eso hará que los sentimientos que tengamos mientras leemos las páginas en las que se desencadena la pelea, estén cargadas de emociones y de un sabor agridulce, porque sabemos que nuestro protagonista hace lo correcto por las razones correctas, conocemos el camino que ha recorrido para llegar a ahí, y también podemos presentir la tragedia que se avecina.
Sin embargo, nuestro protagonista da muerte al monstruo y… no sucede nada. Absolutamente nada. Su alma se queda exactamente donde está y, para empeorar las cosas, nuestro protagonista dice: “Vaya, parece que todo era un rumor después de todo”.
Como lector, te sentirías robado. Quizás una parte de ti se alegre de que el protagonista no murió, pero te quedarás con la sensación de que el final fue malo. ¡Y con buena razón!
Después de todo, buena parte de la carga temática y emocional de la historia estuvo relacionada con ese pedazo crítico de información, incluso si fue presentada como un rumor: quien mata al monstruo, muere con él.
Quitar eso al final no es, como a algunos les gusta decir, “subversión de expectativas”. No, es traicionar las reglas de la historia que presentaste y, por lo tanto, romper por completo la lógica temática de la misma.
De nuevo, quizás esto para algunos sea un mal menor, pero este tipo de cosas son las que destruyen la grandeza, que al final es lo que queremos ver como fanáticos de historias fantásticas.
¡Y listo! Espero que con esto no te quede duda de que la lógica sigue teniendo una gran importancia dentro de las historias fantásticas (si es que existía alguna).
¡Pero no tienes por qué darme la razón! Dime en los comentarios si estás de acuerdo o no con mi perspectiva. ¿Crees que estoy siendo demasiado picky o te identificas con este conflicto interno que tengo? ¡Empecemos un diálogo!
La verdad es que me gustó tu artículo. Fue muy interesante y me reí co la parte de The Last Yedi, te doy la razón lo de Rose fue altamente una estupidez. Esto me hizo recordar otra historia en donde, despues del viaje del personaje y como sufre para llegar hasta donde está, en el final los aliados se sacan una especie de máquina del tiempo de la nada. Y pues eso fue todo. El protagonista regresa al pasado, salva a todo el mundo y impide que los villanos hagan de las suyas todo para terminar en un final de vivieron felices para siempre. Como me molesto eso. Básicamente anularon todo el viaje y la lógica del mundo para entrar un final bonito y tonto. En fin gracias por el artículo y te aseguro que me leeré más de lo que escribes en el futuro.
Purd
hola que tal como estas, dime en el caso del surrealismo o las antitramas? he oido decir que alli no rigen la logica ni causalidad, ni la coherencia, sino al contrario la incongruencia, deux ex machinas, el azar, es lo que he leido en otros articulos, conoces de este tipo de peliculas o series que sean verdaderas obras maestras? hablame al respecto de ello, gracias por tu respuesta de antemano, exitos 🙂