Sistema mágico híbrido: ¿cómo trabajarlo?

Es casi inevitable que, cuando hablo con otros escritores sobre los sistemas mágicos basados en la ciencia y los que están basados en la magia, alguien me pregunte sobre la posibilidad de mezclarlos. La respuesta es sí, pero lo cierto es que construir un sistema mágico híbrido tiene su propia dificultad.

Si quieres aprender más sobre este tipo de sistema mágico y descubrir si es el que tu historia necesita, ¡estás en el lugar correcto! ¡No pares de leer!

¿Qué es un sistema mágico híbrido?

Un sistema mágico híbrido es aquel que utiliza tanto fundamentos científicos y mágicos para establecer su funcionamiento y reglas. Es decir, la ciencia y la objetividad se utilizan para explicar algo que, en realidad, es un elemento meramente fantástico.

Un ejemplo de esto lo vemos en la serie Arcane: League of Legends, en las que el sistema mágico trabaja con base en ecuaciones y principios científicos, pero su fuente de poder es una piedra mágica.

Esto también lo podemos apreciar con muchos de los superhéroes de Marvel como los X-men o Los Cuatro Fantásticos, donde los poderes de los personajes son fantásticos y mágicos, pero se justifican narrativamente por términos científicos reales como la evolución y la radiación cósmica.

Por supuesto, cabe destacar que esos ejemplos representan la versión más superficial de los sistemas mágicos híbridos, ya que la parte científica es más que nada una herramienta narrativa para introducir el sistema en la historia.

Los mejores sistemas mágicos híbridos trabajan a fondo esa parte científica, haciendo que tenga una gran relevancia en la trama y en las temáticas que maneja la historia.

¿Qué puede aportarte?

De hecho, eso último que mencioné es crucial para entender el rol más importante que juegan esta clase de sistemas mágicos: trabajar un componente filosófico con profundidad.

Verás, los sistemas mágicos basados en la fantasía son muy útiles para trabajar simbolismo, mientras que los sistemas mágicos basados en la ciencia aprovechan su realismo para plantear una pregunta estilo “¿qué pasaría si…?” en la audiencia.

Como te podrás imaginar, los sistemas mágicos híbridos combinan estas ideas, lo que les permite aprovechar un realismo ilusorio para aterrizar de forma más clara y directa los elementos simbólicos fantásticos.

Por ejemplo, Full Metal Alchemist se aprovecha de la alquimia (una práctica real con bases científicas) para desarrollar un sistema mágico fantástico, en el que los personajes hacen alarde de habilidades más parecidas a las que encontrarías en Hogwarts.

Sin embargo, el enfoque no está en plantear la pregunta “¿qué pasaría si la alquimia funcionara así o asá?”, ni tampoco está solo en el mero simbolismo de reestructurar las cosas; sino en el componente filosófico del principio del intercambio equivalente (“nada puede ganarse, sino se da algo del mismo valor a cambio”).

El supuesto realismo hace que la audiencia se plantee el componente filosófico en serio sin que se olvide de pensar en términos abstractos. Es una mezcla muy particular, pero extremadamente útil si quieres que tu historia maneje dilemas filosóficos tanto desde un punto de vista simbólico y abstracto como de uno objetivo y argumentativo.

Una advertencia antes de continuar

Quizás lo que mencioné antes te haga pensar que los sistemas mágicos híbridos son los mejores porque te dan lo mejor de los dos mundos, pero lo cierto es que no es así.

Para empezar, los sistemas híbridos no pueden cumplir los roles de los otros sistemas mejor que ellos. Es decir, un sistema híbrido no puede manejar el simbolismo como un sistema fantástico, ni tampoco una pregunta existencial como lo hacen los sistemas científicos.

Además, justamente por eso, es propenso a quedar en un punto muerto que afecta negativamente la historia, perdiendo tanto el misticismo de la fantasía como el realismo que aporta la ciencia.

Este sistema lo usas cuando lo que te interesa es la discusión filosófica directa y no quieres elegir entre la vaguedad de los símbolos abstractos y los límites de la realidad, sino encontrar un punto medio que te permita darle la vuelta a ambas cosas. ¡Tenlo muy en cuenta!

¿Cómo trabajar un sistema mágico híbrido?

Para que un sistema mágico híbrido tenga relevancia narrativa, es muy importante que le prestes atención a tres elementos en particular. ¡Aquí te los comparto!

Reglas claras

Ya que los sistemas mágicos híbridos tienen componentes científicos, están obligados a ser Hard en lugar de Soft.

Eso significa que sus reglas deben ser claras y estar muy explicadas, de lo contrario, será imposible que el dilema filosófico que presentan sea explorado a fondo.

Aunque el sistema tenga un componente mágico, este no debe ser una excusa para introducir conveniencias narrativas ni un misticismo barato. La magia existe simplemente para ayudarte expandir con facilidad el alcance del sistema, no para introducir elementos vagos y extraños.

La magia debe ser consistente y, hasta cierto punto, predecible. De la misma forma que la nitroglicerina explota cuando la tiras al suelo con fuerza, la magia debe tener reacciones establecidas y utilidades prácticas, o de lo contrario la ilusión de realismo será imposible de mantener y la necesitas para que el dilema filosófico pueda florecer.

Dale un trasfondo filosófico al sistema mágico híbrido

Bueno, a lo largo del artículo creo que he dejado este punto bastante claro, pero tengo que mencionarlo de todas formas. Lo importante de este sistema, más allá de las particularidades de su funcionamiento, es la idea filosófica que arrastra.

Volviendo al ejemplo de Arcane, el trasfondo filosófico gira en torno a “utilizar lo indescifrable y misterioso para el desarrollo de la humanidad”. Esto lo utiliza la serie para explorar la soberbia del intelecto como temática, haciendo que nos preguntemos si realmente es progreso meternos con cosas que no entendemos y que, por lo tanto, pueden tener consecuencias catastróficas en nuestro mundo.

Lo mismo sucede en las historias más complejas de los X-men, en donde el sistema mágico híbrido recibe más profundidad y nos hace plantearnos si una persona debe ser definida por los demás o por sí misma de acuerdo a las características que tuvo al nacer.

Ambas ideas tienen distintos puntos de vista filosóficos que se pueden explorar en la historia gracias a cómo el sistema mágico los vuelve una realidad en el mundo de los personajes.

¡Es por eso que ofrecen tanto valor a sus respectivas narrativas!

Une la filosofía del sistema mágico con el arco de los personajes

Los que le darán vida al conflicto filosófico en la historia van a ser, inevitablemente, los personajes y esto no será posible si sus arcos de personaje no les obligan a lidiar con el dilema filosófico que el sistema mágico híbrido (se supone) está colocando en el centro de la historia.

Mientras más miembros del elenco principal tenga conflictos que permiten explorar los distintos argumentos que ofrece la discusión filosófica, mayor será la profundidad que el sistema dará a la narrativa.

Por ejemplo, en Full Metal Alchemist (donde, te recuerdo, el principio filosófico que se explora es “nada puede obtenerse, sino se da algo de igual valor a cambio) vemos cómo:

• Edward y Alphonse exploran lo difícil que es determinar la equivalencia de algo cuando introduces la moralidad.
• Los homúnculos exploran cómo incluso la maldad humana puede dar frutos por medio de este intercambio.
• Roy Mustang explora la idea de que, para obtener algo bueno y deseable, quizás necesites ensuciarte las manos.
• Scar explora que la búsqueda de balance puede crear su propio caos.

Todos estos personajes, al interactuar con el sistema mágico híbrido, logran llevar su exploración temática hasta sus últimas consecuencias. ¡Por eso es que termina teniendo tanto valor narrativo!

¡Y ya llegamos al final! Espero que el artículo haya sido interesante y salgas de aquí con al menos algo nuevo.

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